domingo, 31 de julio de 2016

Pirámides en la Tierra, 14. LGE. 446


Pirámide es cada vida,
basada en el nacimiento,
sufrimiento sus aristas,
y en sus lados anidan
todos nuestros pensamientos,
nuestros lloros y sonrisas.

El Sol nos alumbra el día,
nos mece el sueño la Luna,
y los rayos se detienen
al no encontrar al vigía
que defiende la llanura,
las palmeras y laureles.

Nuestras vidas representan
a Sirio y a las tres Reinas,
dominando el firmamento;
así llevan nuestras cuentas,
nuestros triunfos, nuestras ruinas,
por tener a Dios contento.

Cada paso va marcando,
nuestras ideas y acciones,
nuestros éxitos, fracasos,
los errores reparando,
en todas las estaciones,
en todo tiempo y espacio.

Invencible deterioro,
limitaciones sin cuento,
enfermedades mortales;
nos regalan el tesoro,
nos conducen al encuentro,
hasta hacernos inmortales.
…….

sábado, 30 de julio de 2016

Pirámides en la Tierra, 13. LGE. 445


Pirámide es cada vida,
basada en el nacimiento,
sufrimiento sus aristas,
y en sus lados anidan
todos nuestros pensamientos,
nuestros lloros y sonrisas.

El Sol nos alumbra el día,
nos mece el sueño la Luna,
y los rayos se detienen
al no encontrar al vigía
que defiende la llanura,
las palmeras y laureles.

Nuestras vidas representan
a Sirio y a las tres Reinas,
dominando el firmamento;
así llevan nuestras cuentas,
nuestros triunfos, nuestras ruinas,
por tener a Dios contento.

Cada paso va marcando,
nuestras ideas y acciones,
nuestros éxitos, fracasos,
los errores reparando,
en todas las estaciones,
en todo tiempo y espacio.

Invencible deterioro,
limitaciones sin cuento,
enfermedades mortales;
nos regalan el tesoro,
nos conducen al encuentro,
hasta hacernos inmortales.
…….

viernes, 29 de julio de 2016

Pirámides en la Tierra, 11. LGE. 444


Pirámides son los días,
con su base en la mañana,
sus aristas y su vértice,
sus alegres melodías,
sus heridas, sangre grana,
y nuestro sueño bendice.

No hay dos días iguales,
aunque sean semejantes,
por sus cuitas y sus celos,
por tantas gentes amables,
tan aparentes amantes
y tantos embustes sueltos.

Amigos y compañeros
de trabajo y picardías,
que la vida nos alegran,
que nos erizan los pelos,
nos rompen las celosías
y sin la novia nos dejan.

Siempre hay un come cocos,
que nos vende hasta la madre,
y, sólo por quedar bien;
hablan hasta por los codos,
nos engañan como nadie
y, quizás, roban también.

Bendito sean los buenos,
que siempre están contentos,
los que en la encrucijada
eligen sin argumentos,
llueva, granice y con viento,
lo mejor de la jornada.
…….

miércoles, 27 de julio de 2016

Pirámides en la Tierra, 10. LGE. 443


Al pie de esa pirámide,
donde la sombra no existe,
encontré una luciérnaga;
“sube, nadie te lo impide”,
le dije; y me dijo triste:
“nadie me sube a su espalda.”

Estaba solo y hambriento,
con el rabo entre las patas,
rechinándole los dientes,
y los ojos sin aliento;
“¿es que tienes garrapatas?”
“no, ni amigos, ni parientes.”

La rama de un limonero,
de los que alegran mi huerto,
pesaba más de la cuenta;
era el peso de un jilguero;
“¿estás dormido o muerto?”
“lo verás, si tu me sueltas”.

Miraba, orante, al cielo,
mientras las nubes pasaban
al ritmo que pasa el viento;
el perro arañaba el suelo,
mientras al cielo ladraba;
no vi nada; ¡¿qué vio el perro?!

Todos los años, por mayo,
vuelve el jilguero a mi huerto,
hace el nido tan bajito,
que, entre piadas y amagos,
puedo espiar sin esfuerzo
sus hijos, siendo pollitos.
…….