martes, 14 de febrero de 2017


PENSANDO EN LOS ENAMORADOS, como nosotros 

Hoy, 14 de febrero, celebramos el Día de los Enamorados,
en el que podemos ver el amor reflejado en los miles de
millones de parejas humanas.

Día de flores, comidas, vestidos, joyas, besos y detalles, 

El Amor es el motor que ha creado y mueve el mundo que
vemos, y el Amor, que se oculta bajo el velo misterioso de
la distancia y el tiempo, inexistentes para los que se aman.

Un gran porcentaje de seres humanos, no han descubierto
el valor del Amor auténtico; por eso se ahogan sin cesar, en
la profundidad de su disfrute, lo convierten en un  problema
sin solución de egoísmo e incomprensión, víctimas del odio,
el rencor y la muerte.

El Amor es eterno, o no es es amor; por eso,
es generoso, como la vida,
sincero, como la luz,
sencillo, como el aire,
constante, como la respiración,
musical, como los latidos del corazón.

El Amor, no tiene vacaciones,
no se cansa de esperar,
corrige los defectos, en vez de echarlos en cara,
está siempre alegre,
sólo desea hacer felices a los que tiene al lado,
el Amor está presente los 86.400,06 segundos del día.
…….
¡Salvo mejor opinión!

sábado, 11 de febrero de 2017

GRATITUD PARA TODOS


Desde este lugar del mundo, desde la Era cuaternaria, en el Periodo Pleistoceno, 2,580 millones de años, a través del tiempo y la distancia, sigue manando una fuente de agua,
de sangre y de vida, trasmitiendo unos genes humanos, materiales y espirituales, hasta hoy intactos, orientados hacia un futuro garantizado en nuestra estirpe.

Cumplir años significa una suerte, una alegría imposible de traducir con palabras, y el deber de hacer posible la felicidad compartida, no solo con la esposa, con los familiares, hermanos, cuñados, sobrinos, hijos y nietos, sino también con los amigos, los vecinos, compañeros de trabajo, alumnos y personas, de toda clase y condición con quien hemos compartido la vida, el pan y el progreso.

Ayer todos, desde el alba hasta la última hora, tuvisteis el amor y la generosidad de una sonrisa, al desearme FELICIDAD y ánimos para seguir viviendo.

Quisiera tener un corazón y una mente más capaz de comprender y de amar, comparable a vuestro recuerdo y generosidad, para mi más sincera GRATITUD hacia vosotros.

Deseo que Él, nuestro Padre común, tan oculto y presente en nuestras vidas, os colme de amor infinito, haciéndoos llegar mi bendición sacerdotal, a cada uno de vosotros y a vuestras respectivos familiares.